CONSEJOS PARA EL EXÁMEN ORAL

martes, 6 de julio de 2010

Mensaje escrito por Crisfeine el 29 de mayo de 2010 en el foro de Educación Infantil


No te preocupes por el temblor, déjalo que haga su propia vida, si estás pendiente de ello da por hecho que lo hará más.
Los temblores son producto de tu descarga de adrenalina, la parte del cerebro que está sobreactivada responde al estrés que te provoca la situación, y es la forma en que tu cuerpo se prepara para el combate que le pidas, tanto si huyes de una manada de leones, como si te toca leer delante de un tribunal.
Estar nervioso es bueno, porque te activa el estado de alerta, a mí no me gustaría no estar nada nerviosa antes de un examen, pero dentro de un orden, y puedes aprender a controlar el exceso con las siguientes pautas de mi cosecha:
ANTES DEL EXAMEN
1) Prepárate para la parte oral, tanto la lectura como la defensa de la programación. ¿Cómo? pues si te da mucho yuyu, empieza de menos a más. Empieza con dos familiares delante, del tipo “abuela” de los incondicionables que te van a sonreir todo el tiempo. No les dejes hablar y empieza y termina controlando los tiempos y soltando todo el rollo. Si te atascas o se te olvida, no vale decirlo, estás de ensayo general y tienes que salir por tus medios de cualquier embrollo.
Si la primera vez, no sales airosa porque te atascaste demasiado, sigue practicando en voz alta y mirándote al espejo hasta que lo tengas perfecto, luego los vuelves a reunir y haces lo mismo que la primera vez.

Cuando esta parte la tengas superada, añade a más familiares de los que se aburren con nada, (tipo hermano, primos, etc) deja que hablen entre ellos o que hagan lo que quieran. La única premisa es que no se pueden ir (al menos no todos a la vez…). Suelta otra vez toda la defensa y procura envolverlos en tu discurso cambiando la mirada y moviéndote frente a ellos (todo esto siempre de pie, a tiempo de sentarte siempre estás, pero el efecto no será el mismo, ni te comerás el espacio tan bien como si estás de pie). Si se ponen todos a hablar, tú a lo tuyo, sigue como si nada, no pares pase lo que pase, si el tribunal se convierte en un caos, mejor, no los mires directamente, en este caso es mejor que mantengas la mirada por encima de sus cabezas, pero no mires al suelo.
Una vez que ya estén todos bien hartos de tus ensayos y tú ya tengas bastante soltura, ya puedes tirar de amigos de tus familiares, (estas personas mayores que los conoces de toda la vida pero que tampoco te irías de vacaciones con ellos) les invitas a cenar, o mejor, te vas a su casa y les sueltas otra vez la defensa, (si no estás en tu ambiente, te dará más miedo, así que aprovecha que es lo más parecido a ir al examen)
La cantidad de veces que lo tengas que hacer, dependerá de ti, de como te vayas sintiendo. Cuando ya te dé igual hacerlo delante de conocidos que de desconocidos, estarás preparada.
2) No te prepares para nadie, quiero decir, no te pegues panzadas a estudiar y esperes un milagro el día del examen, si te entra el sudor frío nada más pensar en ponerte delante de alguien, no estás preparando esta parte. Tienes que ser capaz de mirar a los ojos de los demás, porque no convencerás a nadie mirandote las zapatillas, parecerá que no te lo crees ni tú, o ¿has convencido a tu madre alguna vez de que no has hecho algo mirando al suelo? cuando quieres convencer, cuando quieres dar peso a lo que dices, siempre, siempre hay que mirar a los ojos, aunque sea un momento, en las partes clave, donde más fuerza y convencimiento quieres demostrar. Si esto te cuesta, practícalo también.
EL DIA DEL EXAMEN
1) No veas este día como si fueras a estrellarte contra él, será un día más, y pasará tan rápido como los demás, solo que cuando haya terminado, tú podrás descansar, dedicarte a otra cosa más interesante o darte un paseo con la tranquilidad de que ya lo tienes todo hecho. Así que espéralo con ilusión, no con recelo, o te pondrás más nerviosa conforme se acerque. Recuerda que este día te libera, será un día maravilloso, donde por fin podrás demostrar lo que sabes, si piensas en positivo, (es más, tienes que pensar en positivo) estarás deseando que llegue, como el día del parto, tiene sus momentos difíciles, pero luego ves al niño….
2) Acepta los nervios como algo positivo, cuando te encierren justo antes de entrar, aprovecha los últimos 15 minutos para hacer ejercicios de respiración, ¿te acuerdas de la película de Karate Kid, aire dentro, aire fuera? pues así es una buena forma de hacerlo. Si haces ejercicios para respirar con el diafragma, tu voz sonará normal cuando empieces a hablar, si no los haces, tendrás voz de gallina y con un toque tembloroso.
3) Repite comigo “me encanta hablar en público, me encanta que me vean hablar el tribunal, me encanta el examen oral…” y todas las frases que se te ocurran en esta línea. Si lo haces, tendrás una ayuda extra de tu subconsciente que puede suponer un 80% de mejora. (si no un 100%)
Y….ahora te toca poner todo esto en práctica, yo lo hice todo punto por punto, y saqué unas notas inmejorables.

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